El colectivo arbitral otorga los trofeos a los ascensos de la campaña 09-10

Los miembros del colectivo arbitral cordobés realizaron en la noche del viernes la entrega de trofeos de la temporada 2009-10, a los árbitros más destacados. El acto tuvo lugar en el Restaurante La Bodega y contó con la presencia de representantes arbitrales de las diferentes provincias andaluzas, así como de árbitros de Primera y Segunda División. Además, como autoridades, asistieron el delegado del colegio de entrenadores, Pablo Susín, el delegado de la Federación Andaluza de Fútbol, José Santiago y el presidente del Comité Técnico Andaluz de Árbitros de Fútbol, José Gallardo.

Tras la pertinente cena, Antonio García Llácer, que ejerció como presentador, fue anunciando a cada árbitro reconocido por haber ascendido de categoría, destacando los ascensos de Juan Ramos a División de Honor de Fútbol Sala, y la de Ródenas Queralta a Tercera División de fútbol. Así mismo se entregaron distinciones especiales al propio Juan Ramos, Ramón del Olmo Moreno, José Manuel Hervás y Rafael Navarro. A continuación, José Gallardo entregó sendas insignias de oro a Matías Caballero y Antonio Cantón. El último reconocimiento fue para el propio Ernesto Crespo, entregado por Antonio Gallardo "en nombre de todos los colegiados".

Con este gesto comenzó la última fase del acto, que más pareció una cena de despedida, que una entrega de distinciones. El primero en tomar la palabra fue Ernesto Crespo, que agradeció la presencia a las autoridades y se mostró orgulloso del colectivo que presidía, siendo cortado en un par de ocasiones por el auditorio, que coreaba constantemente "Toneti" uno de los nombres con los que cariñosamente se le conoce. Y es que las palabras del actual delegado sonaban a despedida. Conocido es de todos su falta de comunión con los rectores del colegio a nivel andaluz, y si ha conseguido llegar hasta este momento en el cargo, más parece ser porque no encuentran recambio para sustituirlo, que por la confianza que tienen en él.

Esto quedó patente en el segundo interviniente, José Gallardo, presidente del Comité Técnico Andaluz de Árbitros de Fútbol, quien felicitó a todo el mundo (premiados, a la comisión organizadora, al árbitro que ha ascendido a División de Honor -no pareció saber su nombre-, a la Federación por la puesta en marcha de la clínica del deporte... sin embargo, no tuvo una sola palabra para su delegado en Córdoba, al que ni tan siquiera se refirió en el tiempo de su alocución.

El turno de oratoria lo cerró Santiago Murillo, que más modesto que su antecesor en el turno de la palabra fijó en tres los años que se ha tardado en hacer la clínica del deporte, Gallardo lo había cifrado en dos, (será cuestión de tirar de hemeroteca). El máximo dirigente del fútbol cordobés mostró ser bien nacido y dio las gracias a quien lo puso en el cargo y lo mantiene, Eduardo Herrera, de quien dijo en relación a la clínica del deporte "lo dijo y lo ha cumplido". Fijó en la primera semana de abril  para el cambio a las nuevas dependencias "donde vamos a estar todos juntos". Y genio y figura, ante un auditorio con diferentes señoras, recurrió a la testosterona para mostrar la fórmula para llegar a ser un gran árbitro "si quereis ser como Paradas, Ramírez Domínguez y Fernández Borbalán, para eso hay que echarle muchos huevos".