Xabier Eleizegi es nombrado por los árbitros como mejor delegado de Segunda División
Trabaja como funcionario de la Diputación de Gipuzkoa, jefe de la unidad de turismo. Fué árbitro durante 24 temporadas, las siete últimas en Segunda división, pero estuvo a punto de subir a la máxima categoría varias veces. Tiene buenos recuerdos del arbitraje, de las veces que hizo de árbitro asistente con Urío Velázquez, sobre todo en un Madrid-Barcelona. A nivel internacional le gustaba el italiano Colina y ahora valora cómo saca los partidos Pérez Lasa. Se retiró del arbitraje en 2001, le llamó el ex consejero realista José Luis Barrenetxea para que hiciera de delegado en Anoeta, y hasta hoy. Acaba de ser elegido por los árbitros mejor delegado de Segunda División.
- Primero ha sido una gran sorpresa. Creo que es un premio a la Real por su buen hacer organizativo cuando se juega en Anoeta. Eso es lo que ven los árbitros, claro, y eso es lo que han valorado.
- (...)
- ¿Y cuál es su labor ?
- Cuando la Real juega en Anoeta llego al campo dos horas antes. Compruebo que están disponibles las plazas de garaje para los colegiados, preparado el vestuario, las conexiones de internet, en definitiva todo lo que necesita el árbitro para su labor. Después acompaño al trío arbitral al campo... y es una gozada porque lo que más les impresiona es lo perfecto que está Anoeta: la hierba, las rayas pintadas, la red...
- ¿Y si el trío arbitral llega de víspera, se le invita a conocer Donostia o a cenar por ejemplo...?
- Totalmente prohibido. Está totalmente prohibido relacionarse en cuestión de cenas y atenciones antes y después del partido.
- Entonces, todas esas historias de regalos a los colegiados, sobre todos en los partidos internacionales, ¿ son un invento?
- Eso, son historias. Sí que cuentan que antes en Europa a los árbitros les atendía el equipo de casa...
- Y también cuentan que cuando los colegiados extranjeros pitaban en el Bernabéu se iban con bolsas llenas de El Corte Inglés... Y, al revés, a los colegiados de aquí les llenaban de caviar en Rusia.....
- Nada, no se regala nada a los árbitros. Ahora, a los árbitros les atienden gentes relacionadas con la Federación, con el arbitraje. Todo está perfectamente organizado.
- Además, los árbitros cobran muy buenos sueldos. Por cierto, ¿cuánto gana un árbitro de Primera?
- Andan por los 15 o 16 millones de las antiguas pesetas.
-¿Y en Segunda?
- Por la mitad, unos ocho o nueve.
- ¿Y qué le parece?
- Me parece bien que cobren y que poco a poco el arbitraje avance hacia la profesionalización..
- ¿Qué hace falta para ser un buen árbitro?
- La mayor virtud de un árbitro es saber leer el partido. Hay que aplicar la regla número 18. Me explico. Hay 17 reglas y la número 18 es la del sentido común. Mira, el otro día, Pérez Lasa en el Barça-Valladolid con un 4-0 no dio ni un minuto de descuento. Aplicó la regla número 18.
- ¿Eleizegi cómo se hizo árbitro?
- Me llamó para ser árbitro un compañero de ikastola, que fue juez de línea internacional Carlos Martín Nieto. Con el tiempo ha terminado siendo mi cuñado.
- 24 años de árbitro y nueve años y medio de delegado. ¿Se siente a gusto en esta labor?
- Estoy encantado. Es una gran familia. Yo siempre digo que tengo tres familias: la mía, la del arbitraje, porque sigo siendo árbitro, y la de la Real.
- ¿Y sufre con la Real?
- Muchísimo, muchísimo, no te haces ni idea. Yo he sido árbitro y era seguidor de la Real, pero en todos estos años he completado un curso acelerado de sentimientos. Te podía contar más de una anécdota...
- Me lo imagino anoche mascullando más de una decisión arbitral, pero guardando la compostura.
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