Video: Suspenden un partido de la liga sueca por el lanzamiento de petardos

Minuto doce del partido entre el Malmoe y el Djurgarden de la liga sueca. Martin Hansson, árbitro internacional, envía a los jugadores a las duchas. No hay más que ver sobre el terreno de juego.

El colegiado daba por concluido así un choque marcado por los incidentes en la grada. Hasta ese instante se habían lanzado cuatro petardos al terreno de juego. Uno de ellos impactó cerca de la zona donde estaba un fotográfo, que tuvo que ser trasladado a un hospital cercano para examinar si había sufrido daños en el oído.

«Es demasiado arriesgado jugar así. Se trata de la seguridad de todos. Las personas que van al fútbol no deberían que exponerse a este tipo de situaciones», lamentaba Hansson ante las cámaras de televisión. Tras su pitido final todavía caería algún artefacto más desde las gradas, donde también se produjeron peleas entre aficionados.

Episodio recurrente

Tras media hora de conversaciones entre ambos equipos y los miembros de seguridad del estadio, el partido fue cancelado definitvamente. La policía evacuó a los aficionados que se encontraban en la tribuna sin que, por el momento, se haya realizado ninguna detención.

Se trata del tercer partido suspendido esta temporada en el campeonato sueco por incidentes en la grada, y el segundo que se registra en el estadio del Malmoe. Y es que en el mes de mayo el partido entre el equipo local y el Helsingborg fue suspendido después de que un espontáneo saltase al campo y agrediese al colegiado. El guardameta del equipo visitante había sido alcanzado segundos antes por un petardo.

También esta temporada, en un encuentro que disputaron el AIK y el Syrianska fueron alcanzados un juez de línea y un recogepelotas por estos artefactos pirotécnicos.

Posibles sanciones

Según la prensa sueca, aún no está claro qué aficionados fueron los que lanzaron los petardos al tereno de juego. El comité de disciplina de la federación sueca revisará las imágenes de televisión y los informes del partido antes de emitir una sentencia en un plazo de dos semanas que podría acarrear sanción para los dos equipos.

El presidente de la federación, que se encuentra en Brasil para presenciar el sorteo de la fase de clasificación para el Mundial de 2014, condenó inmediamente lo ocurrido. «Es completamente inaceptable y está claro que habrá consecuencias», sentenció Lars-Ake Lagrell. 

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