Pascal Erlachner: “Sí, soy gay, ¿y qué?”
El árbitro suizo de la máxima categoría en su país, ha concedido una extensa
entrevista al diario germano Blick en donde confiesa su homosexualidad.
Pascal Erlachner en 1980 en Olten (Suiza). En julio de 2010, hace
su debut en la Challenge League y en octubre de 2012, tiene su primera
aparición en la Súper Liga. Hasta la fecha, ha liderado 73 juegos de Super
League y 80 en Challenge League. Erlachner trabaja a tiempo completo
como profesor de deportes especializado. Junto con su compañero, vive en
Wangen, cerca de Olten, en la casa de sus abuelos.
Pascal ha dado este paso: “Porque la homosexualidad en el fútbol sigue
siendo un gran tabú. Espero que mi salida estimule una discusión
pública. Si no hablas de un tema, es el punto muerto. Y el
estancamiento es regresión. Y porque para mí y para mi entorno, mi
homosexualidad es algo normal. Me encuentro fuerte, tengo una estupenda
relación, una gran familia. Me siento muy cómodo arbitrando y tengo grandes
compañeros. A la gente a la que le gusto, le gusto como soy. Ahora me siento
con suficiente confianza”.
No espera que todas las reacciones sean positivas: “Habrá gente que
piense que es genial que finalmente alguien de fútbol defienda públicamente su
homosexualidad. Pero todavía hay muchas personas que sufren de
homosexualidad siendo silenciadas. Especialmente en fútbol. Si solo
puedo ayudar y alentar a un solo futbolista o árbitro con mi experiencia,
entonces mi compromiso público ha valido la pena.
No entiende que la homosexualidad sea desaprobada en el fútbol: “A
menudo me he preguntado eso. Los futbolistas gay pueden temer las
reacciones de los otros jugadores, los fanáticos en el estadio,
las reacciones en el lector o las columnas de comentarios. Miedo de que
el entrenador los detenga de repente. Temeroso de que su
salida incluso pueda significar el final de su carrera”.
Aunque Pascal espera seguir su carrera como hasta ahora: “Creo que la
Asociación Suiza de Fútbol no me dará la espalda y me apoyará. No sé lo que me
sucederá. Me permitieron arbitrar casi 80 juegos de la Super League hasta
el momento. Por supuesto, espero que sigan utilizándose regularmente en el
futuro”.
Y piensa que todos lo respetaran: “Mi deseo es que entrenadores y
jugadores me den las gracias al final por mi compromiso en el juego y me
despidan, como lo han hecho hasta ahora“.
Fuente: Diario Blick
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