Sergio Pezzotta y la jubilación de un árbitro
El ex árbitro de Rosario (Argentina), Sergio Pezzotta comenzó por curiosidad en
julio del 90 en el mundo del arbitraje pero una lesión de columna le ha
obligado a retirarse a sus 50 años, aunque sigue vinculado a la actividad
arbitral como dirigente de SADRA (Sindicato de Árbitros Deportivos de la República
Argentina).
Ser árbitro...
Es difícil explicar la pasión del árbitro. Vale decir que originalmente
intenté ser jugador, pero era malo. Me probé a los 16 y ya era grande. Además
mi vida de niño no fue sencilla porque me crie con mis abuelos. Pero encontré
en el arbitraje la forma de poder estar metido en el fútbol. Obviamente que en
ese momento no pensaba en que iba a llegar al profesionalismo, porque no
estaban dadas las condiciones, ya que en la década del 90 todos los árbitros
eran de Buenos Aires. Tenías que vivir en Capital Federal o en un radio de 60
kilómetros para poder dirigir, por suerte eso se fue cambiando con la aparición
SADRA y hoy estamos en otra realidad.
¿La vida arbitral afecta a la
familia?
Tuve la suerte de que mi esposa me acompañó en todo, porque hemos
pasado momentos muy lindos y otros muy complicados. También un árbitro debe
prepararse psicológicamente para transitar momentos de mucha presión y estrés,
y yo lo hice. Esta profesión, como el periodismo y tantas otras, te impide
estar en momentos familiares irrepetibles. En mi caso sólo estuve en el
nacimiento de mi primer hijo, Guido, pero en los de Bruno y Gina
lamentablemente no estuve porque estaba dirigiendo. La clave es la comprensión
de tu pareja con respecto a tu trabajo.
Retirado…
Sí, porque en marzo tuve otra cirugía de columna y ya tuve que parar.
Digo otra porque ya había sido intervenido en 2014. Eso me permitió recuperarme
en la época del Mundial, y todo 2015 y 2016 arbitré mucho, hubo meses en los
que hice hasta seis partidos porque estaba bien física y mentalmente, y lo
disfruté mucho. Es lo que hoy extraño, y mucho.
¿Los árbitros también padecen la
crisis del retiro?
Es difícil porque siempre dije que iba a prepararme para irme y la
verdad que nunca te podéis preparar para una decisión así. En mi caso encontré
una continuidad dentro del gremio, porque me gusta gestionar, pero es difícil
decir hasta acá llegué.
¿Qué sucede con la jubilación de
los árbitros?
En la AFA no hay lugar para todos los árbitros que se retiran. Es
difícil. Y si bien se percibe un buen ingreso cuando estás en actividad, lejos
estás de tener tu vida resuelta, y es complicado encontrar la inserción en el
ámbito laboral a los 48 o 50 años. Antes la AFA cuando te retirabas te daba
como una indemnización que ayudaba para transitar esa búsqueda, por eso ahora
se están estudiando opciones para resolver esto.
¿Importancia de SADRA?
El SADRA abrió el juego a todo el país. Y gracias a eso un cordobés o
un misionero dirigieron en un Mundial. Un juez asistente de Rafaela fue al
Mundial con Horacio Elizondo. Eso se logró federalizando el arbitraje. Y
gracias a esto terminamos con otra gran injusticia que era lo que sucedía en
las ligas regionales, donde antes las finales las dirigían árbitros que venían
de Buenos Aires y cobraban fortunas, en cambio ahora todo lo dirigen árbitros
del interior. Y esto porque firmamos un convenio colectivo entre la AFA y el SADRA
que permite que el árbitro que dirigió a lo largo de cada torneo también pueda
dirigir la final.
Fuente: La Capital
¿Qué opinas?