Mateu Lahoz, entre la crítica y el elogio

Mateu Lahoz, nacido en Algímia de Alfara (Valencia) hace 41 años, es uno de los árbitros que la FIFA ha seleccionado para estar en el Mundial Rusia 2018. Una vez cumplido su sueño, ahora piensa en arbitrar la final junto a sus dos árbitros asistentes, Pau Cebrián y Roberto Díaz: “Siempre que España no llegue a la final”.

Considera que la preparación para el Mundial ha sido de una enorme exigencia, con seminarios formativos del VAR, del cual tiene una opinión muy positiva: “El colegiado dispondrá de más ángulos y más tiempo para decidir, aunque la última decisión la tomará siempre el árbitro. Aunque se pierda un minuto, si sirve para corregir un error, vale la pena”.

De niño, prefería jugar de futbolista y llegó a jugar en las categorías inferiores del Valencia CF. Pero a los 15 años se decide por el arbitraje y tras pasar por todas las categorías inferiores llegó a Tercera División donde estuvo tres temporadas. Como árbitro de Segunda B estuvo dos temporadas y en Segunda División estuvo cuatro años. Fue al final de la temporada 2007/08 cuando quedó muy bien clasificado y logró ascender a Primera División, debutando en la 2008/09 y hasta el momento lleva 188 partidos en su haber. La internacionalidad le llego en 2011 participando, entre otras competiciones, en dos Copas del Mundo Sub-20 (2015-2017) y en los Juegos Olímpicos del 2016.

Con su debut, se ha convertido en el décimo quinto árbitro central español que participa en un Mundial de Fútbol. En este ranking destaca el colegiado Juan Gardeazábal que participó en tres ediciones: Suecia 1958, Chile 1962 e Inglaterra 1966.

Mateu tiene una forma de arbitrar que no pasa desapercibida para nadie, hay quienes la critican y otros que la elogian. Entre sus premios, destacan: