Al habla con Laura Fortunato, la árbitra de la final
¿Cómo era Laura Fortunato como
jugadora? ¿Cómo te llevabas con los árbitros?
Era muy tranquila. Me dedicaba a
jugar y a divertirme. Jugué muy poco tiempo, dos o tres años nada más, al
principio en once en Sportivo Barracas -de cuatro- y después en futsal -mucho
de ala-, en ese club y en Boca. Soy la jugadora que todos los árbitros quieren,
no tenía problemas.
¿Qué es lo mejor de ser árbitra?
Lo mejor de ser árbitra es el día
a día, compartir con los compañeros... Dirigir un partido con gente que te
llevás bien es mucho mejor. También es dirigir partidos donde se vaya a jugar,
que no te estén pidiendo cualquier cosa. Es diferente cuando ves dos equipos
que realmente van a jugar al fútbol y van a buscar el resultado de manera
profesional. Ver un buen partido, porque el árbitro también es parte de eso y
disfruta alguna jugada con algún futbolista que se pasa a cinco o seis y
termina en gol, o algún tiro libre que la claven en un ángulo. A veces uno dice
que pasa seguido, pero la realidad es que no: ¡la mandan a la quinta bandeja!
(risas).
¿Y lo peor?
Lo feo es cuando no tienen ganas
de jugar los equipos, cuando te la hacen difícil, cuando te reclaman hasta el
perro que pasó por la esquina... Ahí un poco se te van las ganas, pero te
terminas acostumbrando. Por suerte son más las veces que disfrutás del partido.
¿Se puede vivir del arbitraje o
tenés otro trabajo?
Depende de la categoría y de
cuánto juegues. Si te lesionás no podés dirigir, entonces para algunas
categorías se puede y otras no. En las más amateur, fútbol femenino o
juveniles, la verdad que no se puede vivir solo del arbitraje. Si uno se
mantiene, evita las lesiones y cosas de ese estilo, se puede llegar a vivir el
día a día, pero no podés ahorrar o quizás tener una visión a futuro. Soy
profesora de educación física y trabajé en escuelas hasta hace dos años, antes
de la pandemia. Recién en la preparación para el Mundial de Francia (2019) me
volqué exclusivamente al arbitraje porque tuvimos muchos viajes, cursos y
torneos, y es difícil sostener un trabajo de ese estilo. Más adelante lo
retomaré.
Por las diferencias físicas a la
hora de jugar, ¿se prepara distinto un partido masculino de uno femenino?
En un partido de selecciones o de
Mundial femenino creo que corrés más que un partido de Reserva o Inferiores masculino.
Uno tiene que prepararse para lo máximo que se pueda. Si el fútbol masculino
tiene más exigencia, debe prepararse para eso. En el fútbol femenino es muy
relativo, tiene mucho que ver con la calidad de los equipos que jueguen.
¿Cómo pasaste el parate por el
coronavirus? ¿Cuánto te afectó en tu trabajo o en tu preparación física?
Lo físico dentro de todo traté de
trabajarlo desde mi casa. Por supuesto que bajó un poco, porque no es lo mismo.
Pero creo que fue leve. Lo que más me costaba es extrañar ir a la cancha,
preparar el bolso, llegar, que el día esté lindo, dirigir el partido, compartir
con los compañeros. Eso fue lo que más se extrañó.
¿Te gusta otro deporte? ¿Te
gustaría dirigirlo?
Me gustaría mucho poder ver las
carreras de atletismo. Cuando son los Juegos Olímpicos o eventos de ese estilo
mirás todo. Arranca a la mañana y estás todo el día mirando.
¿Cuál es tu mejor foto en redes
sociales?
Estas en el Mundial, con Alex
Morgan y la siguiente, con Rapinoe. Esas son muy buenas. Tengo muchas fotos de
finales, de partidos importantes, pero me quedo con ese partido en Francia.
Cuando se googlea quién es Laura Fortunato, ¿Qué te gustaría que aparezca?
Soy una persona muy tranquila. Me
considero muy profesional en lo que hago y trato de dejar el máximo en cada
partido. Hay veces que sale mejor y otras peor o no tan bien, pero es parte de
lo que uno está preparado. Soy bastante compañera. Me gusta que no solo me vaya
bien a mí sino a todo el grupo arbitral. Creo que los logros se dan en equipo y
me parece que los errores también se deben hacer cargo en equipo.
¿Qué opinas?