El viaje de Kateryna Monzul a la EURO femenina

La árbitra ucraniana Kateryna Monzul ha tenido un viaje más largo que la mayoría hasta el Campeonato de Europa Femenino de la UEFA 2022 y su presencia en el torneo en Inglaterra es también un tributo a la solidaridad del fútbol europeo.

Kateryna de 41 años pasó por una experiencia difícil y peligrosa a principios de este año cuando estalló la guerra en Ucrania. Optó por dejar el país para escapar de las hostilidades, e inicialmente acompañada por sus dos hermanas y sus tres hijos, se embarcó en un viaje que finalmente la llevó a establecer una base en Italia y habilitarla para continuar su carrera como árbitra.

Tiene un currículum distinguido: comenzó como árbitrainternacional en 2004, participó en tres Copas Mundiales Femeninas de la FIFA y fue elegida para oficiar en la final de 2015 entre Estados Unidos y Japón en Canadá.

La etapa de este verano en Inglaterra es la cuarta en una fase final de la EURO. Participó en el torneo de fútbol femenino de los Juegos Olímpicos de 2016 y arbitró la final de la Liga de Campeones Femenina de la UEFA de 2014 en Lisboa, y también trabajó como cuarta árbitro en la final de 2018.

En 2016, Monzul comenzó a arbitrar partidos en la Premier League masculina de Ucrania, la primera mujer árbitro en hacerlo, y también ha sido asignada a partidos en la UEFA Europa League y la UEFA Europa Conference League. En noviembre de 2020, ofició en el partido de la UEFA Nations League entre San Marino y Gibraltar como parte del primer equipo de árbitros exclusivamente femenino en hacerse cargo de un partido internacional masculino senior.

Esta impresionante trayectoria profesional se vio interrumpida en febrero tras el estallido de la guerra en Ucrania. Monzul y su familia sintieron los efectos inmediatos. “Nadie esperaba que, en pleno siglo XXI, pudieran ocurrir este tipo de situaciones. Es una situación difícil para todas las familias ucranianas, como pueden imaginar, porque las familias están desconectadas. Cuando comenzó la guerra, nadie podía creerlo al principio. Mi familia fue a la casa de mis padres y estábamos [viviendo] bajo tierra, un lugar especial en la casa. Estuvimos allí durante cinco días".

Monzul finalmente tomó la decisión de dejar Ucrania y viajó en automóvil con sus dos hermanas y sus tres hijos a través de Moldavia, Hungría, Eslovaquia y la República Checa antes de llegar a Alemania.

Afortunadamente, los acontecimientos avanzaron rápidamente. Se produjeron sinergias entre la UEFA, la Federación Italiana de Fútbol (FIGC) y el organismo arbitral italiano AIA, y se abrieron las puertas a Italia. Se facilitó alojamiento en Turín y Monzul, dejando a una hermana y sus dos hijos en Alemania, viajó al sur, a la metrópolis italiana.

La AIA le concedió una cita inicial en la competencia de la Serie A femenina italiana, y luego se hizo cargo de los partidos en el campeonato juvenil de la Serie A masculina. El respaldo crucial de la AIA, junto con el apoyo inquebrantable de la UEFA y la FIGC, la pusieron en condiciones de continuar con su profesión.

Abril trajo noticias positivas adicionales para Monzul, cuando se confirmó su selección para el grupo de 13 árbitras de la EURO femenina en Inglaterra. "Agradezco a toda la familia del fútbol porque todos me han ayudado mucho. Los colegas árbitros ucranianos e internacionales también [se pusieron en contacto], y esto fue muy, muy importante para mí".

Espera regresar a Ucrania lo antes posible y comparte un último pensamiento destacado. "Lo más importante es detener esta guerra: la paz mundial es lo más importante. Es mi [esperanza] para todos".

Fuente: UEFA