El primer árbitro transgénero del mundo reflexiona sobre su viaje de cinco años

Han pasado cinco años desde que el londinense, ahora de 50 años, se convirtió en el primer árbitro transgénero de Inglaterra. En una conversación, Lucy Clark habló sobre su viaje hasta el momento después de declararse transgénero y ser la primera árbitro trans en ser reconocida por la FA.

"Mi línea favorita es que soy árbitro y soy transgénero, así que tengo la piel más gruesa que puedas tener".

Es un eslogan conciso, uno potencialmente apto para un superhéroe. Pero Lucy Clark rápidamente descarta cualquier comparación hercúlea. En cambio, Clark se ríe mientras lo dice.

Sin embargo, hay una sutil oscuridad en el humor. Los problemas relacionados con los derechos y el reconocimiento de las personas transgénero han creado divisiones cada vez más agresivas en todo el mundo. En el deporte, las disputas de elegibilidad de personas transgénero han dominado varios órganos de gobierno y alienado a los atletas.

Clark no finge ignorancia de esta realidad. Ella está familiarizada con la violencia y el vitriolo que la comunidad transgénero ha sufrido históricamente, y es notablemente sincera al respecto, y admite que fue el miedo a esto lo que la mantuvo luchando consigo misma durante 30 años antes de decidir salir del armario en 2018.

Ciertas noches, la batalla mental que libraba se la tragaba, llevándola a arrojar su ropa y pertenencias a las llamas en un acto de abnegación.

La preocupación de cómo el fútbol se negaría a aceptarla pesaba especialmente y casi la convenció de colgar el silbato cuando llegó la temporada 2017-2018.

“Pensé que el mundo del fútbol no me aceptaría para ser honesto contigo. Así que pensé que sería mi última temporada”, dice.

Una serie de ataques cardíacos, uno en el que Clark fue hospitalizado durante la Navidad, le inculcaron una nueva perspectiva. Con la ayuda de su esposa Avril y su amiga y promotora de boxeo transgénero Kellie Maloney, Clark decidió adoptar su identidad.

Fanática de toda la vida del Sutton United, Lucy recuerda un intento de suicidio.

 “Tan extraño como suena, solía mirar hacia Sutton United, era mi amor, eran mi equipo y miraba hacia afuera y veía el suelo y sí, algo me hizo parar y eso es lo único que puedo señalar, tiene que ser eso entonces. Fútbol."

“El fútbol es para todos. Es el deporte más grande del mundo. Todo el mundo ama el fútbol. Y para mí, el fútbol me salvó la vida. Si no tuviera fútbol, ​​no estaría aquí hoy. El fútbol me permitió olvidar lo que pasaba por mi cabeza cuando era adolescente y cuando estaba deprimido”

“Tiene que haber un lugar para las personas trans en el deporte, tiene que hacerse de manera justa pero tiene que haber un lugar para nosotras. Especialmente en el fútbol”

Clark ha regresado a Sutton United, ofició partidos para su equipo femenino y masculino, esta vez como Lucy.

Fuente: MIRROR